La
curadora del museo de Antioquia, Nidia Gutiérrez, el día 2 de Julio en la rueda
de prensa, anunciando la apertura de la
obra VIACRUCIS del maestro Botero, decía, “Botero es un artista
universal, es un hito en la historia del arte de la Cultura Occidental”.
La
exposición inaugurada el 5 de julio estará abierta hasta el 27 de septiembre de
2013, es una de las celebraciones centrales del Sesquicentenario, es por ello,
una CON-MEMORACIÓN. Memorar es hacer memoria, es PENSAR, es preguntarse por lo
fundamental.
Comparto
con los lectores apartes del discurso de Martin Heidegger, invitado a su pueblo natal Messkirch, a
pronunciar unas palabras CONMEMORATIVAS en honor del músico Conradin Kreutzer,
Sobre
la obra del artista y su universalidad afirma Heidegger, “Cuanto
más grande el maestro tanto más desaparece su persona detrás de la obra”, y
sobre la obra citando al poeta Aleman Hebel dice, “Somos plantas - nos guste o no admitirlo - que deben salir con las
raíces de la tierra para poder florecer en el éter y dar fruto” Con lo cual
se reafirma lo dicho por Carlos Fuentes y tantos otros, No hay globalidad que sirva sin
localidad que valga.
Continua
Heidegger diciendo que la ocasión nos lleva a PENSAR, pero haciendo distinción entre
el Pensamiento Calculante y el Pensamiento Meditativo. El Pensamiento
Calculante da lugar a la ciencia, a la técnica. En un extremo de las esperanzas
de tal pensamiento, lleva a expresar a un Nobel de Química en 1955 en una
reunión de galardonados, “algún día el mundo estará
en manos de la química”...
En
relación con el pensamiento meditativo, dice en la ocasión el filósofo alemán, “Si intentamos meditar lo que la celebración
de hoy nos sugiere, observaremos que nuestra época se ve amenazada por la
pérdida de arraigo. Y preguntamos: ¿qué acontece propiamente en esta época?,
¿qué es lo que la caracteriza?”, “¿Qué sucede aquí, lo
mismo entre los que fueron expulsados de su tierra natal que entre los que
permanecieron en ella? Respuesta: el arraigo del hombre de hoy está amenazado
en su ser más íntimo. Aún más: la pérdida de arraigo no viene simplemente
causada por las circunstancias externas y el destino, ni tampoco reside sólo en
la negligencia y la superficialidad del modo de vida de los hombres. La pérdida
de arraigo procede del espíritu de la época en la que a todos nos ha tocado
nacer.”. ¿Si esto es así, puede el
hombre, puede en el futuro una obra humana todavía prosperar desde una fértil
tierra natal y elevarse al éter, esto es, a la amplitud del cielo y del
espíritu? ¿O es que todo irá a parar a la tenaza de la planificación y la computación,
de la organización y de la empresa automatizada?
Con
esta invocación voy a atreverme a hacer un pensamiento meditativo teniendo al
frente la obra VIACRUCIS del Maestro Botero.
Afiche de la Exposición en el Museo de Arte de Pereira. Julio 5 - Septiembre 27 de 2013- Patrocinada por InfiPereira |
En
un tema completamente recurrente en el arte pictórico como el religioso, quizás
gastado, quizás agotado, el Maestro Botero lo pone en escena con nuevos
sentidos. Sobre la profundidad y vigencia del mensaje Cristiano, en el cuadro
“Jesús y la multitud”(cuadro usado en el afiche de promoción), pareciera que Jesús
se instala entre nosotros, pero todos tenemos otras miradas, otros horizontes,
lo ignoramos y esa multitud no es la de Jerusalén, puede ser cada uno de
nosotros, un campesino de Altagracia, un jugador de dados, un comerciante, un
vendedor informal…. En el cuadro “El camino de las penas” no es un centurión el
que da látigo, es un policía de verde oliva.
Hay
quienes afirman que bastaría cumplir un solo
código, el Decálogo de Moisés, incluso hay quienes van mas allá, cumplir
una sola regla, la regla de oro “trata a los demás como te gustaría ser
tratado”
Pues
bien aquí estamos nuevamente 2000 años después frente a las mismas preguntas:
¿Qué
somos? ¿Qué sentido tiene nuestra sociedad? ¿Hay un sentido de la historia? ¿Del
progreso? ¿Del desarrollo? ¿Cual
es la bitácora para los próximos 150 años?, ¿para la próxima década?
Claro
que con profesionalismo la Alcaldía de Pereira ha realizado un ejercicio de
prospectiva, pero llamo la atención sobre la extensión y la intensidad de las
propuestas asumidas de manera poco entusiasta por los diversos grupos de
interés de la sociedad civil.
Esta
sociedad que ha tenido grandes éxitos en el pasado, su primera fase de
industrialización en los años 20, su segunda fase de industrialización en los
años 50, el civismo de los años 60 a los 80, pues le ha llegado la hora de que
hagamos nuevos acuerdos, un pacto por Pereira, que no es un civismo de nuevo
cuño, es un pacto del siglo 21, sea esta la reflexión que nos deje el Maestro
Fernando Botero, la invitación a todas y todos para darle horizonte a una
ciudad atribulada por la desigualdad, el desempleo, la informalidad, el bajo
capital social, el bajo capital humano, la desaceleración de las tasas de
crecimiento en el producto interno bruto, no es hora de engañarnos, es hora de
un nuevo pacto por una Pereira Mejor.
El
mejor regalo para Pereira en sus 150 años es una Idea de Futuro, un Pacto Por
Pereira, un acuerdo como resultado de una amplia movilización social.
Es
bueno pensar en el futuro, allí pasaremos el resto de nuestros días.
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